Hay veces en que tu ausencia me golpea tanto hasta hacerme sangrar, y otras en que tu silencio es tanto hasta hacerme agonizar.
Hay veces en las que ya no sé si odiarte o quererte más, si olvidar tu nombre sentarme a esperar...
Te pareces tanto al cielo! tan inmenso. Llegas con tu impecable magia y cuándo más te necesito te vas...
Y en las noches cuando tu recuerdo me acribilla, tengo que pellizcarme para saberme apegado a la realidad.
Hay noches en que he gritado tu nombre hasta quedar inconciente pero no llegas, no escuchas, no estás. Y entre más creo odiarte te quiero más.
Tu ausencia me ha provocado una psicosis que me hace delirar entre vivir o morir, entre seguir o esperar pero esto es más que un estado mental, el peor de los casos es este: NO ESTAS!
Talvez deba marcharme lejos tragarme todo el vino del mundo hasta ahogar los hígados, drogarme hasta volar, llorar, reír, vomitar hasta destrozarme los pulmones , llorarte veinte litros, sacarme las neuronas hasta borrar la última huella en mi laberinto cerebral.
Eres un entupido, un tonto! que se me ha cansado la garganta, La cabeza, las sienes, los ojos de tanto llorar, que se me ha muerto la lira de poeta, que me abandonaron los sueños ridículos que no dejaban de fregar.
Pero estoy seguro, Ya lo presiento... Te sigo queriendo como la primera vez que bese tus labios.
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